La adopción mundial de las criptodivisas aumentó en más de un 880% en 2021, según la investigación realizada por la empresa estadounidense de análisis de la cadena de bloques, Chainalysis.
 

En la actualidad, hay más de 320 millones de criptousuarios en todo el mundo. Se espera que la adopción global de cripto continúe aumentando a un ritmo rápido y algunos pronostican que el cripto alcanzará los 1.000 millones de usuarios en 2030.
 

 
Fuente: tripleA
 

Sin embargo, las criptomonedas no se han adoptado al mismo ritmo ni por las mismas razones en los distintos países y regiones.
 

Hay varias barreras que superar antes de que la moneda digital sea aceptada como dinero sólido en todo el mundo, y algunas regiones están avanzando más rápidamente que otras.
 

Los países emergentes dependen más de las criptomonedas
 

Se podría esperar que los países desarrollados y prósperos, como EE.UU. y el Reino Unido, fueran líderes en la adopción de criptodivisas. Sin embargo, los datos de la Encuesta Global de Consumo de Statista de 2022 muestran lo contrario.
 

Mientras que sólo el 6% de los encuestados de Estados Unidos posee o utiliza monedas digitales, los consumidores de países de África, Asia y Sudamérica son los más propensos a poseer criptodivisas. Por ejemplo, casi el 33% de los encuestados por Statista en Nigeria declararon poseer o utilizar monedas digitales.
 

Los nigerianos también utilizan cada vez más las operaciones de dinero móvil para pagar en las tiendas o para enviar dinero a familiares y amigos. Mientras tanto, los consumidores polacos pueden comprar varios tipos de productos con una criptodivisa desde 2019 y, en 2021, El Salvador causó sensación al convertirse en el primer país en hacer del Bitcoin una moneda de curso legal que permite a los residentes pagar impuestos y saldar deudas con ella.
 

Las diferencias en la proliferación de criptodivisas en todo el mundo han sido impulsadas por necesidades y casos de uso notablemente diferentes, entre los entornos de los mercados desarrollados y los emergentes.
 

En las naciones desarrolladas con mercados estables, el uso de las criptodivisas sigue siendo una novedad. Sin embargo, en los mercados emergentes, las criptodivisas pueden ayudar a aliviar las barreras sociales y económicas y, por lo tanto, tienen mayores tasas de adopción de criptodivisas entre los ciudadanos para su uso diario, sobre todo como resultado de que las divisas convencionales no cumplen sus promesas.
 

"Para los mercados desarrollados [la posesión de criptodivisas es] un pasatiempo, para los mercados emergentes es una necesidad. En los países emergentes, la gente carece de muchas herramientas e infraestructuras y probablemente está limitada por barreras políticas, geográficas, tecnológicas y económicas." - Lou Yu, de KuCoin Labs.
 

Las monedas nacionales de los países en vías de desarrollo a menudo no cumplen su doble función de actuar como medio de cambio y como unidad de cuenta, y están sujetas a una inflación impredecible, tipos de cambio volátiles, estrictas restricciones financieras, incertidumbre normativa y costosas instituciones bancarias.
 

Estos problemas han contribuido a erosionar la credibilidad del dinero fiduciario en muchas regiones emergentes y han impulsado la necesidad de formas alternativas de dinero, incluida la moneda digital o, en su defecto, el acceso a una moneda más estable de otras naciones.
 

Impacto de la criptomoneda en la economía y la inmigración
 

Es una observación común que las personas que viven en mercados fronterizos y emergentes suelen emigrar a países del primer mundo en busca de mejores oportunidades.
 

El motivo de su inmigración no suele ser la búsqueda de un estatus (muchos acaban realizando un trabajo de baja categoría por debajo de su nivel de educación y cualificación), sino la búsqueda de una estabilidad salarial relativamente libre de la inflación y la volatilidad de su país de origen.
 

La criptomoneda podría cambiar significativamente esta dinámica global.
 

Si el mundo adoptara un estándar de criptomoneda, una mayor integración global de las personas y los sistemas conduciría a un estándar laboral en el que no hay una ganancia significativa en emigrar a un país diferente para trabajos de baja cualificación.
 

En lugar de ello, las personas tendrían más opciones e incentivos en su país de origen, lo que podría hacer crecer y apoyar su economía local. Además, los inversores podrían encontrar y financiar más fácilmente las oportunidades en los países en desarrollo sin el riesgo de devaluación de la moneda.
 

Los bancos centrales quieren recuperar el control.
 

A medida que los casos de uso de la criptomoneda y la tecnología blockchain siguen evolucionando, los consumidores de todo el mundo se sienten cada vez más cómodos e interesados en las monedas digitales y en el potencial de las sociedades sin efectivo.
 

Por ello, los gobiernos y los bancos centrales de todo el mundo están explorando la posibilidad de utilizar monedas digitales respaldadas por el gobierno o una Moneda Digital del Banco Central (CBDC).
 

Aunque la idea de las monedas digitales de los bancos centrales proviene de las criptomonedas y la tecnología blockchain, las CBDC y las criptomonedas no son lo mismo. Las CBDC son fichas digitales, similares a las criptomonedas, emitidas por un banco central y vinculadas al valor de la moneda fiduciaria de ese país.
 

Los CBDC están controlados por un banco central, mientras que las criptomonedas están casi siempre descentralizadas, lo que significa que no pueden ser reguladas por una sola autoridad.
 

En la actualidad, más de 100 países -que representan más del 95% del PIB mundial- están explorando las CBDC. Algunos investigan, otros prueban, y unos pocos ya distribuyen CBDC al público. Por ejemplo:

• • En las Bahamas, el Dólar de Arena -el CBDC local- lleva más de un año en circulación.
• • El Riksbank de Suecia ha desarrollado una prueba de concepto y está explorando las implicaciones tecnológicas y políticas de la CBDC.
• • En China, el renminbi digital [llamado e-CNY,] sigue avanzando con más de cien millones de usuarios individuales y miles de millones de yuanes en transacciones.
   

Los dos principales impulsores de las CBDC son

• • La volatilidad de las criptodivisas - El auge y la caída de monedas estables algorítmicas no tan estables como TerraUSD, así como de criptodivisas completas como Bitcoin, han hecho que los bancos centrales se preocupen por la estabilidad financiera de sus propias economías.
• • La pandemia mundial - A lo largo de la pandemia, el mundo ha desencadenado una cantidad de estímulos fiscales y monetarios sin precedentes. Los gobiernos y los bancos centrales se dieron cuenta de que necesitaban una forma más rápida y segura de hacer llegar el dinero a la gente. Resulta que los CBDC podrían ser la respuesta.
   

Otras ventajas de los CDBC son

• • Elimina el riesgo de terceros ante eventos como quiebras o corridas bancarias.
• • Los elevados costes de las transacciones transfronterizas pueden disminuirse reduciendo los complejos sistemas de distribución y aumentando la cooperación jurisdiccional entre los gobiernos.
• • Elimina el coste de implementar una estructura financiera dentro de un país para llevar el acceso financiero a la población no bancarizada.
   

Sin embargo, todavía se desconocen en gran medida los efectos que tendría el cambio a la CBDC en la estabilidad de un sistema financiero. Por ejemplo, puede que no haya suficiente liquidez del banco central para facilitar las retiradas durante una crisis financiera.
 

Además, los bancos centrales tendrían que aplicar la política monetaria para influir en la inflación, los tipos de interés, los préstamos y el gasto, lo que a su vez afecta a las tasas de empleo. Los bancos centrales tendrán que asegurarse de que disponen de las herramientas necesarias para influir positivamente en la economía.
 

Además, mientras que la privacidad es uno de los motores más importantes de la criptodivisa, los CBDC requerirían cierta intrusión por parte de las autoridades para controlar los delitos financieros.
 

A pesar de los riesgos e inconvenientes, la proliferación de diferentes modelos de CBDC -especialmente entre los mercados emergentes- está creando una nueva urgencia para el establecimiento de normas internacionales que está atrayendo a las conversaciones a las naciones más ricas.
 

Por ello, la Casa Blanca de EE.UU. publicó recientemente una orden ejecutiva en la que se pide el desarrollo responsable de los activos digitales.
 

En resumen
 

La historia del dinero está entrando en un nuevo capítulo. En todo el mundo, las personas y los gobiernos están experimentando con nuevas formas digitales de dinero, al tiempo que preservan aspectos clave de sus sistemas monetarios y financieros tradicionales.
 

Sin embargo, que la moneda digital se considere una novedad o una necesidad puede depender de la situación económica de cada país. En los mercados emergentes, los pagos con criptomonedas han empezado a resolver el problema de la desigualdad de ingresos a nivel mundial para los individuos de a pie. Para las naciones desarrolladas, es más probable que las criptomonedas se utilicen para invertir sin fronteras y sin los vientos en contra asociados a las instituciones y sistemas financieros tradicionales.
 

A medida que crece el mercado de activos digitales, los gobiernos de muchas naciones están explorando la posibilidad de utilizar monedas digitales respaldadas y reguladas por el gobierno, llamadas CBDC. Pero se desconoce en gran medida cómo afectarán las CBDC a las economías, a las redes financieras existentes y a la estabilidad.
 

A medida que el sector madure y aumente la adopción global, la moneda digital emergente podría crear oportunidades más equitativas para que las personas construyan su riqueza y su vida, independientemente de la geografía.
 
 

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